El avión Airbus A320 operado por la aerolínea de bajo costo Germanwings, propiedad de Lufthansa, se estrelló el 24 de marzo en el sur de Francia cuando cubría la ruta Barcelona (España) – Düsseldorf (Alemania). El avión había partido a las 9:55 del aeropuerto de El Prat.

Llevaba 144 pasajeros a bordo y seis tripulantes (dos pilotos y cuatro ayudantes de cabina). Los pasajeros eran, en su mayoría, de Alemania y España, pero también habían británicos, argentinos, colombianos, entre otras nacionalidades.

En las primeras 24 horas tras el accidente, la compañía de Colonia puso en marcha medidas para no perder prestigio, sobre todo cambios en sus redes sociales. La estrategia consiste en comunicar todo lo relacionado a la tragedia con el hashtag que crearon: #indeepsorrow (“En profundo dolor”), lo usan ambas aerolíneas, GermanWings y Lufthansa.

También cambiaron el color de sus logos a negro en señal de luto, al igual que diferentes movimientos de publicidad con el objetivo de no perder el prestigio que tiene a nivel internacional. Como por ejemplo la publicidad que tuvieron que retirar, en el cual se leía: PREPÁRESE PARA SER SORPRENDIDO. VISITE ALEMANIA.

Un héroe toma el mando

Britta Englisch, pasajera del vuelo entre Hamburgo y Colonia, compartió en su Facebook las palabras que les dirigió el piloto antes de despegar, y su mensaje ya tiene más de 300 mil “me gusta” y se compartió 20 mil veces por los usuarios de la red.

Englisch relata su nerviosismo al tomar el vuelo de Germanwings y cómo el comandante dio la bienvenida a cada pasajero en el avión. Tras el despegue, el piloto abandonó un momento la cabina para pronunciar un pequeño discurso tranquilizador entre los pasajeros.

Comenzó explicando que toda la tripulación estaba conmocionada por la catástrofe y que todo el personal del avión estaba allí voluntariamente, en referencia a los vuelos anulados de la compañía por la negativa de algunos pilotos a volar.

Un día después, este mismo piloto, Frank Woiton, de 48 años, cubrió la ruta Düsseldorf – Barcelona, la misma de la tragedia, y en el vuelo repitió su discurso.

¿Qué pasó?

El avión cayó en picada y se calcula que cayó precipitadamente en menos de 8 minutos. ¿Por qué?

El copiloto, Andreas Lubitz, fue identificado como responsable de la tragedia. Según dijo Bruce Robin, responsable de la investigación judicial, que el tripulante hizo descender la aeronave “con voluntad de destruirla”.

La hipótesis está basada en el audio de la caja negra, donde primero se escucha al presunto responsable hablar durante 20 minutos con el comandante, quien más tarde le pidió que tomara el mando. Después hay silencio.

Lubitz trabajaba para la compañía aérea desde septiembre de 2013, tenía 630 horas de vuelo. Y estaba bajo un tratamiento de antidepresivos y el tranquilizantes Lorazepam, una droga prescrita para quienes tienen problemas de sueño, ataques de pánico y ansiedad, al momento de la tragedia.

Andreas Lubitz causó un gran impacto y curiosidad en internet. Bajo su nombre se registraron más de 190 mil tuits, lo cual lo llevó a convertirse en trending topic mundial. Pero no solo quedó ahí, desde el anonimato de internet le dedicaron una página pública en Facebook como “héroe del Estado Islámico”, antes de que la investigación confirmara que no había una motivación terrorista por parte del copiloto.

Fue clausurada por la propia red social, al igual que su auténtico perfil privado. En la red social permanecía abierta, una comunidad con más de 5.700 seguidores que alude a Lubitz como “el monstruo que mató a 150 personas”.

#Germanwings también fue tendencia mundial en Twitter, y obtuvo más menciones, casi 900 mil tuits desde el día del accidente.

Medidas de seguridad después de 9/11

La mayoría de las compañías aéreas y los gobiernos tomaron varias medidas luego del atentado del 11 de septiembre. Se adoptaron aquellas medidas para mantener a los terroristas fuera de la cabina, pero nunca pensaron que el propio peligro podría estar dentro de la cabina de vuelo.

Por ejemplo, una de las medidas es que las puertas fueron reforzadas con cerraduras con clave, que fueron colocados entre la cubierta de vuelo y la cabina, están diseñadas para mantener alejados a los intrusos. Investigadores franceses dijeron que el piloto, intentó y no pudo abrir la puerta de la cabina durante los ocho minutos, estaba cerrada.

Además, los pilotos de líneas aéreas de Estados Unidos, así como algunos de los transportistas internacionales han recibido entrenamiento táctico para bloquear las puertas desde el interior de la cabina de vuelo.

¿Cuánto pagará Lufthansa a los familiares de las víctimas?

Lufthansa y sus aseguradoras han comenzado la tarea de compensar a las familias de las víctimas. La empresa está aportando un apoyo financiero inicial de 50,000 dólares por víctima.

La principal aseguradora de la aerolínea, Allianz, junto con otras empresas, será responsable de una variedad de pagos, como los costos asociados a la recuperación de los cuerpos así como las indemnizaciones a las familias de las víctimas.

Los pagos finales pueden variar y dependerán de la nacionalidad de la víctima, su edad y su estatus de empleo. Algunas familias podrían recibir menos de 100,000 dólares mientras otras podrían recibir millones. Los pagos son determinados por los sistemas legales de cada país.